Pero Fresh, como le llaman sus amigos, es diferente. Siguiendo las lecciones de su padre, Samuel L. Jackson, (un medio indigente que vive en una caravana y cuya única vida es el ajedrez), decide plantarle cara a su destino como lo haría todo un estratega.
Fresh es un niño rodeado de droga, de miseria, de una historia ya escrita pero nada le detiene. Como si de una partida se tratase comienza a mover ficha aunque pierda piezas esenciales de su vida.
Esta película es una extraordinaria maravilla en la carrera del director. Es todo un reto interpretativo de Sean Nelson (Fresh), Giancarlo Esposito (Esteban) o de Samuel L. Jackson (su padre).
Como una metáfora de la vida, las jugadas del ajedrez se usan para sobrevivir en un mundo terrible para un niño. Los trenes son el sueño de escape de Michael. Su padre lo prepara para ser un jugador implacable pero no sabe hasta que punto llega a conseguirlo.

2 comentarios:
Nunca deberíamos menospreciar la inteligencia de un niño, sus sueños, sus anhelos, su (mala leche?)......Fresh hizo todo lo que hizo por eso mismo, por ser un niño de mente privilegiada gracias a las enseñanzas de su padre y a las de la sabia calle.....
Magnifico post, magnífica peli....nada que añadir a lo ya comentado
Felicidades de nuevo por tu buen gusto amiga
Un abrazo
Gracias Ortiga, me alegra que te guste esta peli. Una lástima que este director no haya vuelto a hacer nada mas parecido.
De nuevo eres el único que comparte gustos.
Un abrazo, amigo
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